Resolución 45/2024 y la aparición del IPK en el nuevo esquema de compensaciones para el transporte público

La Secretaría de Transporte del Ministerio de Economía de Argentina emitió la Resolución 45/2024, una normativa sobre la distribución de compensaciones económicas a empresas de transporte público en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y en líneas interurbanas provinciales. Este cambio introduce una nueva metodología para calcular las tarifas de referencia y distribuir los subsidios, lo que impactará en cómo se financia el sistema de transporte en el país.

¿Qué es la Resolución 45/2024?

La Resolución 45/2024 es una medida administrativa que ajusta la forma en que el Estado distribuye compensaciones económicas a las empresas de transporte que operan en el AMBA y en líneas interurbanas bajo jurisdicción nacional. Estas compensaciones son necesarias para que el sistema de transporte mantenga sus tarifas accesibles para la población, cubriendo una parte de los costos operativos que enfrentan las empresas de transporte público.

Principales cambios de la Resolución 45/2024

La normativa incorpora varios cambios en la metodología de cálculo y distribución de los subsidios. Se centra en dos aspectos clave:

1. Construcción de Tarifas Teóricas de Referencia: Esta metodología determina el precio ideal del boleto en función de los costos fijos y variables del servicio. Esta tarifa es una referencia teórica que no implica necesariamente un cambio en el costo directo para el usuario, pero es esencial para calcular las compensaciones que el Estado otorga a las empresas.

2. Distribución de Compensaciones por Demanda y Cobertura de Costos: La resolución establece cómo se repartirán las compensaciones considerando factores como la demanda real y los costos operativos mínimos. También introduce límites para asegurar que las empresas reciban solo lo necesario para cubrir los costos, evitando ingresos excesivos que no correspondan a los gastos operativos.

Índice de Pasajeros por Kilómetro (IPK): Metodología para la Construcción de Tarifas Teóricas de Referencia

Según el Anexo I de la resolución, las tarifas de referencia se construyen en base a una estructura de costos desglosada en dos categorías: costos fijos y costos variables:

- Costos fijos: Incluyen elementos que no cambian con la cantidad de kilómetros recorridos, como seguros, tasas impositivas, y salarios.
- Costos variables: Dependen directamente de la operación, como el combustible, mantenimiento y depreciación de los vehículos.

La resolución estipula que cada pasajero asumirá una parte de estos costos de acuerdo con el Índice de Pasajeros por Kilómetro (IPK), lo cual permite obtener una tarifa teórica que sirve como referencia para determinar el nivel de compensación a otorgar a cada empresa.

Esta tarifa teórica es importante porque permite al Estado establecer un esquema de compensaciones justas para las empresas de transporte, alineado con el nivel de demanda y los costos específicos de cada línea de servicio. Además, la tarifa de referencia se actualiza mensualmente en función de los datos del sistema SUBE y de los costos reportados por las empresas, lo que permite un ajuste constante a las condiciones reales del mercado.

Distribución de Compensaciones para Líneas Interurbanas y AMBA

Líneas Interurbanas Provinciales

En el caso de las líneas interurbanas, el Anexo II detalla un método de distribución de compensaciones basado en la demanda de pasajeros y en el kilometraje real recorrido. Para asegurarse de que las compensaciones reflejen la demanda real y eviten prácticas ineficientes (como recorridos innecesarios), se establecen controles sobre el IPK y los kilómetros reportados.

Cada línea recibirá una compensación proporcional a sus costos operativos, ajustados por el nivel de demanda. En caso de que una línea no cumpla con los niveles mínimos de eficiencia o reporte kilómetros sin un respaldo en pasajeros transportados, el Estado aplicará ajustes para evitar el despilfarro de recursos públicos.

Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA)

El Anexo III se centra en el AMBA, donde las líneas de transporte se dividen en distintos grupos tarifarios (como Distrito Federal y Suburbano Grupo I y II), con diferentes reglas de compensación para cada uno. En este caso, se aplica un enfoque más específico en la cobertura de boletos integrados (aquellos que permiten realizar combinaciones en el transporte público) y boletos sociales, que se ofrecen a personas en situación de vulnerabilidad.

La normativa también considera el “Boleto Escolar y Estudiantil”, y establece montos mínimos y máximos de compensación para asegurar que ninguna línea opere por debajo de su costo de operación ni reciba ingresos excesivos. Este modelo permite al Estado ajustar las compensaciones según la demanda real de cada grupo tarifario y evita distorsiones en el financiamiento de las distintas líneas.

¿Qué significa para los usuarios?

Para los pasajeros, esta resolución podría traducirse en un sistema de transporte público más transparente en la distribución de los subsidios. Al vincular las compensaciones directamente con la demanda, el gobierno espera fomentar la eficiencia en el uso de los recursos públicos, apoyando a las líneas que realmente necesitan la asistencia para mantener el servicio.

Es importante destacar que esta resolución no necesariamente implicará cambios en el costo del boleto que los usuarios pagan a diario, sino que busca regular y distribuir los fondos de manera que las empresas puedan operar sin problemas. Además, el enfoque en la demanda busca garantizar que las rutas con mayor número de usuarios reciban el apoyo necesario para mantener una frecuencia adecuada y una calidad de servicio consistente.

Control y ajuste continuo de las compensaciones

Un aspecto crucial de la Resolución 45/2024 es el énfasis en los controles periódicos y la revisión de la eficiencia operativa. La Secretaría de Transporte realizará monitoreos regulares para detectar y sancionar prácticas ineficientes, como el reporte de kilómetros no vinculados al aumento de pasajeros.

Esto no solo permite una gestión más eficaz de los recursos, sino que también ayuda a identificar necesidades de ajuste en el esquema de compensaciones, adaptándose a la dinámica de movilidad de cada línea y del sistema en general.

La Resolución 45/2024 representa un avance en la forma en que el Estado distribuye las compensaciones para el transporte público en el AMBA y líneas interurbanas. Al implementar una metodología más precisa y equitativa, la Secretaría de Transporte busca mejorar la eficiencia del sistema de subsidios, apoyar la sostenibilidad de las empresas de transporte y, sobre todo, garantizar que los pasajeros tengan acceso a un servicio público de calidad.

Para los usuarios, este cambio promete un sistema de transporte más estable, ajustado a las necesidades reales de cada área y con un enfoque en la demanda como principal criterio de distribución. Este paso adelante en la gestión del transporte público responde a la necesidad de un sistema transparente, que asegure la distribución justa de los recursos y permita mantener el acceso al transporte como un derecho para todos los ciudadanos.